miércoles, 9 de abril de 2014

Porque 'Tokyo Is Ours'...


Mañana a estas mismas horas, el que os escribe se encontrará sobrevolando el cielo de... no sé... algún lugar indeterminado de la Península Arábiga, en dirección Tokyo y en búsqueda de la dueña de este corazón: la bellísima y bondadosa señorita Drewniak.

Anteriormente el mundo era de color blanco como de palidez, negro de desdicha y de innumerables gamas de grises que no quiero ni volver a interpretar (bien lo sabe Dios), pero de la noche a la mañana ¡zas! aquella prisión tan triste y monocromática desapareció. Ahora, con ella a mi lado, puedo decir sin miedo y sin mordaza alguna que he regresado por fin al mundo y que todo vibra y resplandece en colores: el verde es todo campo, el rojo todo pasión ¿y el azul? ¡Ay el azul!

El increíble azul acuarela de su mirada me ha inflamado de vida, sus caricias me han dotado de movimiento, y su delicada voz resuena sin parar en mi mente, deleitándome más que cualquier melodía o canción que haya pasado jamás por mis oídos.

Perfecta encarnación del bien, de lo exquisito y lo elevado...  Una diosa en la tierra.

Su sola presencia hace que merezca la pena vivir cada segundo, cada pequeño detalle, cada momento...

Porque usted, amor mío, es el verdadero sentido de la vida.

martes, 8 de abril de 2014

Una joyita musical: GWENDAL y su disco 'Glen River'.

La vida está repleta de maravillosas sorpresas, de regalos. Uno de esos benditos regalos es precisamente la capacidad que tiene el ser humano para seguir aprendiendo a lo largo de toda su vida. Por ese motivo, si el hombre se aplica y es curioso, nunca dejará de quedarse boquiabierto y ojiplático ante acontecimientos, descubrimientos y sensaciones de distinta naturaleza (la brisa en el rostro cuando se va de viaje en coche, el aroma de una tormenta que se aleja, los primeros compases de un disco que te acompañará para siempre...) y nunca dejará de avanzar hacia delante.

Esto es lo que personalmente concibo como crecimiento.


Pues hace un par de meses, más o menos, los responsables de que servidor se atreviera a dar un pasito más en su vida musical fueron los bretones Gwendal con su precioso disco 'Glen River'

Dos fueron las razones que hicieron que me comprara este álbum: la primera la portada, que me parece espectacular; y la segunda aquél encantador programa de Los Sultanes Del Swing en el que hablamos de ellos y que hizo que se me quedara la espinita clavada... quedando entonces una herida ya sanada.



Y si dos fueron los motivos por los que me llevé el disco a casa, dos son también las claves que hacen que la presencia de este trabajo sea 'casicasicasi' imprescindible en cualquier buena discoteca que se precie: por un lado está el mimo, respeto y cariño que Youenn Le Berre y Robert Le Gall (los dos jefes de la banda) profesan por la música; y por otro la indudable maestría a la hora de combinar tiempos pasados y tiempos modernos.

Podría dar más apuntes sobre la vida y obra de Gwendal, pero hace ya un tiempo que me cansé de rebuscar y resumir información en el fondo cargante. Antes que todo eso, prefiero... No sé, prefiero leer las "apasionantes" biografías de Messi y Sergio Ramos juntas. ¡Con eso ya os digo todo!

¡Qué bonita es la música!

lunes, 7 de abril de 2014

Paula Quintanar:


Mi amiga Paula es junto a Marta Muñoz una de las dos auténticas, únicas e irrepetibles sultanas de las ondas radiofónicas. Como dije en la dedicatoria de su caricatura, Paula Quintanar es nuestra Euterpe particular: todo delicadeza y sensibilidad musical. Dotada siempre de un gran sentido de la elegancia y del buen hacer, de la disciplina y el trabajo. Elementos como bien pueden suponer muy difíciles de encontrar en este mundo cada vez más perruno... ¡Por eso es tan fácil respetarla y admirarla señores!