martes, 30 de septiembre de 2014

ÑU viene de camino:

Mítico,-ca: Adj. del latín mythicus y este del griego μυθικός. Perteneciente o relativo al mito. Que es muy famoso y sobresale entre los de su género hasta tal punto que ha entrado a formar parte de la historia o se ha convertido en un modelo.


Pues eso, que nuestro bardo Jose Carlos Molina y su irredenta banda visitará mi ciudad este próximo sábado cuatro de octubre para dar un conciertazo. Mi padre no podrá venir pues le toca currar, pero vamos, que será el momento propicio para recordar esta vez en vivo y en directo esa gastada cinta que todavía debe andar por casa y movernos “A Golpe De Látigo”… O de flauta travesera, que en este caso nos viene a ser lo mismo.

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Breve discografía emocional de The Tripwires:

Cuando distintas personas dotadas todas de creatividad y sensibilidad convergen en un punto lo normal es que el resultado de esa colisión sea una sorprendente, tremenda y emocionante explosión de vida... Tal y como les ocurrió a los veteranos estadounidenses The Tripwires con su fresco y multiforme álbum de debut 'Makes You Look Around':


Canción recomendada: "Big Electric Light".

Cuando el talento rebosa y sale por las orejas (como le pasa a por ejemplo al señor John Ramberg) lo normal es que cuando uno se ponga a componer en calzoncillos en el sofá de su casa logre reunir sin problemas un precioso ramillete de canciones como ocurrió muy poquito después con su más que sólida continuación discográfica titulada 'House To House':


Canción recomendada: "Another Planet Now".

Y ya cuando la máquina se encuentra perfectamente engrasada y toda la energía de una banda se concentra tanto en el estudio como sobre el escenario, cuando la composición encuentra el equilibrio perfecto, cuando el bajo eléctrico y la batería suenan más profundos que nunca y las guitarras cortan el aire, lo normal es que el flamante nuevo disco que has adquirido en el concierto y que estás tan ansioso de escuchar (en nuestro caso 'Get Young') sea una @&"%! obra de arte:


Canción recomendada: "Waiting For The Snow".


TO BE CONTINUED...

jueves, 18 de septiembre de 2014

La lluvia te puede enseñar una cosa:


"La lluvia te puede enseñar una cosa. Cuando te sorprende un chaparrón repentino, intentas no mojarte y corres deprisa por el camino. Si, por el contrario, intentas deslizarte bajo los aleros de las casas y recurres a otros subterfugios así, te mojas igual. Si estás resuelto a mojarte desde el primer momento, no te quedarás perplejo, aunque acabes igual de empapado. Esta lección se puede aplicar a todo".

lunes, 15 de septiembre de 2014

lunes, 8 de septiembre de 2014

The Youth: Arrebato R'n'B desde Dinamarca.

Es evidente aquello que dice que el hábito no hace al monje porque de ser así, ayer noche nos tendríamos que haber aburrido tremendamente con The Youth y sus baladas neorrománticas...


Como si se hubieran estado emperifollando para una boda, estos cuatro chicos daneses espoleados por esa curiosa mezcla entre Bastian Schweinsteiger, Woody Harrelson, Eric Burdon y el Michael Douglas de 'Un Día De Furia' que es su cantante y guitarrista rítmico Lasse Tarp (sí, tengo mucha imaginación señores) se presentaron sobre el escenario con toda la tranquilidad del mundo, con la actitud de no haber roto un plato en su puñetera vida... ¡Nos engañaron!

En el primer asalto nos soltaron sin miramiento alguno un zurriagazo de R'n'B tenso y vivificante gracias a temones como "Fancy You" o "Your Love". Ambos, temas incluidos de forma conjunta en su sencillo de debut allá en el lejano lejanísimo año del 2013... Porque esa es otra: la banda es insultantemente joven y en lugar de titubear están dando sus pasitos de consolidación. En su haber, dos singles y un primer y recién LP titulado 'Nothin But... The Youth' que se están convirtiendo por derecho propio en firme sustento de una carrera que promete muchísimo.


Si tiramos de referentes musicales para que las personitas que no pudieron ver a The Youth sepan de qué van, lo primero que se me aparece en la mente es el nombre de esos Kinks tan crudos y directos de los primeros discos, con un Dave Davies (en nuestro caso Jesper Agerbæk) que guitarra en mano se encargaba de aguijonear a todo el mundo que se le ponía por delante; de esos Animals dueños de ritmos salidos de las entrañas con Chas Chandler (o su actual mensajero en la tierra David Peter Jørgensen); de esos Troggs primitivos, básicos e incontestables... Todo canela en rama y todo con mucha entraña de por medio, intensidad y fuerza, como es inexcusable en estos sonidos. El virtuosismo (mira que me gusta) lo dejamos para el Rock Progresivo.




La diferencia entre la propuesta de The Youth con otras bandas de este mismo estilo es que no se encarga de hacer ‘revival’ en el sentido de hacer simplemente versiones o reutilizar-triturar-plagiar clásicos, no. The Youth retoma con cariño esencias pretéritas, el espíritu y el sonido de una época y hace el esfuerzo de mostrárnoslo en estos días en que lo inmediato, frío y fácil es lo que impera y manda. 

En nuestra mano estaba el reconocerles el trabajo y darlos a valer... Y lo hicimos.

Salvo un brevísimo incidente, todo fluyó con naturalidad y continuidad. Las canciones estaban finamente hiladas, mantenidas en vilo y soportadas gracias al esmero del baterista Sune Christian Thomsen, un tipo muy pulcro y apañado que ni se despeinó ni se le arrugó la chaqueta ni naíta ná durante toda la noche... El orgullo de toda madre, vamos.


Dentro del amplio repertorio que nos ofrecieron estos daneses debemos nombrar unos cuantos temazos con los que nos encontramos frente a frente, de primeras y que nos dejaron un recuerdo muy grato. Entre ellos figuran "Bubblegum" (que es el primer sencillo extraído de su LP),  "Girls Like You" (que con la voz raspada de Lasse ganaba aún más en expresividad respecto a la grabación de estudio que estamos escuchando mientras hacemos esta crónica), algún que otro recuerdo pasado con "Don´t Crowd Me" y la elegante y molona "Suede".

Guitarrazos, bajadas del escenario a darlo todo, sudor, movimiento, miradas entre el público con cara de incredulidad, asombro y pasmo... ¡The Youth!




Tras las últimas notas del concierto nos fuimos Daniel Fernández y servidor a hablar un rato con los componentes de la banda (bueno, la verdad es que yo hablaba menos porque soy más de escuchar) y la proximidad que nos habían hecho sentir desde el escenario se mantuvo poco después a pie de barra. En conclusión, The Youth reúne a unos chicos que se sienten sorprendidos del recibimiento que ha tenido su música, que disfrutan haciendo que el público mueva el trasero... ¡Vamos, que lo único malo que puedo señalar es que beben Budweiser!


A la vuelta, estuvimos hablando sobre lo vivido hace unos minutos, sobre qué es lo que decían cuando hablaban entre ellos en danés, lo caro que resulta ser mod hoy día y pensando cómo hacer lo de la crónica... En fin, que no sé qué os parecerá el resultado, sólo puedo decir que el disquito suena a Gloria.




¡Hasta otra!

martes, 2 de septiembre de 2014

Festival Reggae Tuff Kaya y la Watermelon Band Jazz ‘a’ Brass. Porque a la tercera va la vencida:


En su momento dejamos pasar una oportunidad e incluso aunque parezca innnncreíble una segunda, pero ya no dimos cabida a otro resbalón y la noche del veintisiete de agosto, en la tercera edición de Tuff Kaya en la zona del Henares allá que nos presentamos, tras un veranito de lo más ajetreado, con unas ganas tremendas de refrescarnos los oídos con los ritmos jamaicanos en todas sus variantes: Reggae, Ska, Dub,...  ¡Yatúsabes!

El Reggae no es que sea mi género musical favorito a día de hoy pero hace unos años, cuando el que os escribe era un joven melenudo y barbudo sí que le dio bastante a estos sonidos en su habitación, donde predominaba la energía positiva, suavona y bizcochable de Gregory Isaacs, Dennis Brown, Cornell Campbell... Todo muy Lovers Rock, como no podía ser de otra forma.


Aquella noche, todos los reunidos en la Sala EgoLive nos encontramos con la Watermelon Band Jazz ‘a’ Brass abriendo el evento y como plato fuerte, una formación vecina procedente de Guadalajara que lleva trabajando junta unos diez años y que nos tenía preparado un ecléctico y muy bien preparado recital de Música Negra que iba un pasito más allá de lo meramente jamaicano: Jazz, Swing, Reggae, Ska, Funk, Blues...  Muy rico.

Siete musicazos que cabían en el escenario de auténtica chiripa. Sus nombres me los supe durante los breves segundos en los que el mismísimo Charlie Barrena, guitarrista de la banda, me brindó la posibilidad de saludar a todos y cada uno de sus compañeros poco antes de empezar el concierto pero ya os digo que debido a mi memoria de pececillo de acuario, sólo pude retener sus nombres unos segundos.  


El público fue entrando a la sala poquito a poco, con el concierto ya empezado, y tras prestar atención a los dos primeros temazos de la noche (“Take Five” y “Police Woman”) dos cositas de la Watermelon Band Jazz 'a' Brass me llamaron poderosamente la atención:

La primera, que los músicos encargados de la sección de viento son de los que saben otorgar a sus instrumentos el lugar que realmente se merecen, rompiendo con la imagen apolillada y en color sepia que los oyentes hemos ido creando sin casi apenas darnos cuenta. La razón se puede deber a que a grandes rasgos, instrumentos como el trombón de varas, la trompeta y los saxofones han quedado recluidos casi en exclusiva en el mundo de lo clásico-académico-ortodoxo (que para eso está, también es cierto) y fueron perdiendo su espacio dentro de una cultura popular que participaba del concepto y de la idea de música como divertimento. Quizás una buena muestra de esta sensibilidad dicharachera de la banda entera fue la repetición a lo largo del concierto de la siguiente máxima: "Aquí el que no baila es porque no tiene zapatos”.

La segunda, la originalidad y calidad tanto de la interpretación como del repertorio. Un repasito dinámico, ancho de miras, atemporal, libre y desprejuiciado que incluyó en su set-list acertadas composiciones propias como “Arde Madrid”, el “Puttin´ On The Ritz” que Ella Fitzgerald convirtió en un standard del Jazz, el Funk discotequero del “Pick Up The Pieces” de la Average White Band… Todo rozando el lujo sonoro, hasta acabar en apoteosis máxima con “Get Up, Stand Up” de Bob Marley Feat. MD Black y la hipermegaultrasuperversión de un “Barrio Sésamo” que me llegó a lo más profundo de la patata.




Con el sudor cegándome los ojos, arrasado por la energía puesta en escena por parte de esta gente y la agenda de notas repletita, le di el último trago a la cerve y me dispuse para volver a casita en bici, pinchándoseme la rueda trasera a mitad de camino y rezando por que el tío del mazo no apareciera súbitamente en escena... Así de infausta y despiadada es la vida del pobre reportero musical, amigos.

¡Chimpón!